Casi 72.500 personas participaron en 2015 en las diferentes acciones de empleo, formación y economía social de Cáritas 
en toda España. De ellas, unas 15.350 (el 21%) lograron acceder a un puesto de trabajo, la tasa más alta de los últimos nueve años.
La “esperanza” que suponen estos datos, según dijo Sebastián Mora, secretario general de Cáritas, durante la presentación del informe ‘Economía y Personas. Cambiando el foco, cambiamos los resultados’ este miércoles en Madrid, responden a que “cuando el foco se pone en las personas se pueden dar buenas noticias”.
Según resaltó, el éxito de esta labor es porque se apuesta por las personas que la sociedad descarta, que reciben acompañamiento personalizado en cuestiones de orientación laboral, intermediación, formación o autoempleo.
Por eso, dijo que en este contexto de “falta de diálogo” ante las futuras elecciones en las que se “ha perdido el horizonte del bien común”, la ONG de la Iglesia apuesta por las personas, en concordancia con la Conferencia Episcopal y el Papa.
Durante la presentación, en el marco de la celebración del Primero de Mayo, también puso énfasis en la necesidad de que las administraciones apuesten por la inserción laboral de las personas en situación más precaria, pues les preocupa que los políticos lleven seis meses “mirándose el ombligo” mientras se invisibilizan situaciones de injusticia.
Por ello, subrayó que para Cáritas "la noticia” son las víctimas de los terremotos de Ecuador y Nepal (del que se acaba de cumplir un año) o los miles de migrantes y refugiados que buscan un futuro mejor. “Apostar por un tipo de economía donde la persona sea el centro no es una ocurrencia de unas cuantas Cáritas, sino una opción de Iglesia”, que parte de una ética “amiga de la persona”, sentenció.
ESPAÑOLA, DE 30 AÑOS Y POCOS ESTUDIOS
José Luis Pérez Larios, coordinador del equipo de Economía Solidaria de Cáritas, subrayó que en lo que respecta a las opciones de autoempleo, la demanda ha sido “la más numerosa de toda la historia”, con 562 personas participantes y la puesta en marcha de 64 iniciativas.
Pérez Larios también se refirió al perfil de los usuarios de estos servicios, que fueron mayoritariamente mujeres, el 63% del total, y en un 53% de los casos de nacionalidad española (en 2009 sólo el 25% era de esta nacionalidad).
Por edades, aumenta el número de personas entre 35 y 44 años, que suponen el 31%, pero el mayor crecimiento se da entre los mayores de 45, que alcanza el 30%.
En cuanto al nivel formativo, destacó que la mitad de las personas acompañadas apenas ha logrado terminar la Primaria, y un 25% la Educación Secundaria.
Para estos programas de empleo, la confederación Cáritas contó en 2015 con el apoyo de 3.136 voluntarios y 818 personas contratadas y destinó casi 47 millones de euros a acciones de economía solidaria, siete más que el año anterior.
Estos fondos proceden de aportaciones privadas, subvenciones públicas e ingresos de la actividad de la empresas de economía social.
Finalmente tomó la palabra Laura Puerto, técnico de una empresa de inserción social de Viveros ‘El Sembrador’, de Cáritas Albacete, que contó la experiencia de promover la inclusión laboral entre las personas más vulnerables. “El empleo dignifica a las personas”, aseveró, “pero también es importante que al darle las oportunidad se relacionen con otros, adquieran habilidades sociales y formación”.
Durante la presentación también se habló de las 45 entidades de economía social de Cáritas, que en el último año crearon 480 puestos de inserción, un centenar más que en 2014. Asimismo, la Red Interdiocesana de Comercio Justo, compuesta por 28 Cáritas diocesanas, cuentan con 30 tiendas en toda España.
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