Y no se sienten escuchados por la sociedad
Redacción
El 93% de los jóvenes en España considera que hay muy poca oferta laboral para personas entre 18 y 25 años, según el estudio ‘El Futuro es Ahora’, liderado por la empresa PlayGround. El análisis ha sido coordinado por la doctora en Sociología Liliana Arroyo con la colaboración de la Fundación Ashoka, la Universidad ESIC y la plataforma de participación ciudadana Osoigo.
Este estudio, realizado en la primavera de 2021, recoge las principales preocupaciones de 13.587 jóvenes entre 16 y 34 años sobre las cuales se elaboraron 40 propuestas de futuro que se entregaron este miércoles a la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, para salvar la brecha entre la política y los jóvenes en España.
Las propuestas que se plantearon muestran la necesidad que tienen los jóvenes de ser escuchados y participar activamente en la construcción de su futuro.
En la encuesta se puede observar que, a la preocupación por la oferta laboral, le siguen otras también referentes a derechos fundamentales como el acceso a la vivienda y, a continuación, inquietudes sobre el medio ambiente, el ámbito social o la salud, mientras que los nacionalismos o la inmigración se ubican al final de la lista.
Así, la encuesta arroja que el 85% considera que se planifica poco o nada la acción contra la emergencia del cambio climático. En cuanto a la desigualdad, un 51% reconoce que España ha trabajado en reformas para paliarla; un 92% está preocupado por los problemas de igualdad de género, identidades de género incluidas; y un 53% de los encuestados se considera agentes de cambio para contribuir a conseguir los retos sociales.
Por otro lado, el 87% de los jóvenes se sienten poco o nada representados por un partido político y el 92% no se sienten escuchados por los mismos. De igual manera, un 71% considera que los discursos de odio deberían prohibirse, tanto en política, como en redes sociales.
En cuanto a la salud, los encuestados mostraron una concepción integral teniendo como una de sus principales preocupaciones (63%) la salud mental.
Entre las medidas propuestas a los agentes políticos se encuentran adelantar la edad de jubilación para favorecer el relevo generacional; bonificar a las empresas que contraten a jóvenes sin experiencia; regularizar el precio de los alquileres; acabar con la brecha salarial en cuanto a cualquier expresión de género; prohibir discursos de odios que promuevan la xenofobia, el machismo o cualquier tipo de violencia; obligar por ley a la rendición de cuentas a las empresas más contaminantes, así como promover la penalización y reinvención de ese presupuesto en políticas publicas.
Otras propuestas a destacar son que el etiquetado en productos de consumo refleje el impacto ambiental que supone su elaboración con el fin de poder conocer el ciclo de vida de los productos alimentarios y, por último, darle más cobertura a la salud mental.