El alcalde de Vitoria y candidato del PP al Parlamento Vasco, Javier Maroto, anunció hoy en el 'Fórum Europa. Tribuna Euskadi' que propondrá al servicio vasco de empleo, Lanbide, que se modifique la normativa para incluir en los convenios de inserción que firma con perceptores de ayudas sociales una "cláusula cívica por la igualdad". "Propongo que quienes reciban prestaciones sociales asuman por escrito el principio básico de igualdad entre hombres y mujeres", explicó.
Durante su intervención en el citado encuentro informativo, organizado en Bilbao por Nueva Economía Fórum 
, Maroto manifestó que Vitoria es una ciudad "abierta" y que la mitad de sus ciudadanos no han nacido en la ciudad.
Esta cláusula tendría un carácter "obligatorio" y sería "imprescindible" para acceder a las prestaciones sociales. "Una cláusula tan fácil de asumir para la mayoría, que quizás empezaría a delatar a quienes no tienen reparo alguno en contravenir este principio básico, pero tampoco tienen reparo alguno en apuntarse y exigir como el que más estar dentro de un sistema público de asistencia y prestaciones", puntualizó.
El candidato y alcalde del PP indicó que "el debate está en la calle" y "debemos evitar que afloren discursos sociales extremos, que encuentran en la radicalidad y en la xenofobia un motivo para revolver y convulsionar".
EXCLUSIÓN
Maroto quiso dejar claro que "el acento, el color de la piel o cualquier otro motivo no puede ser causa de exclusión", pero piensa que hay que empezar a "hacer lo correcto" y combatir a "quien busca aprovecharse, o incluso atacar directamente a una sociedad como la nuestra que ha crecido sobre el pilar de la solidaridad con el que menos tiene".
Javier Maroto cree que "algo está fallando" y opinó que hay que adaptar las leyes y normas para "hacer incompatible que los mismos que rechazan nuestros principios básicos de convivencia, que no creen en nuestro modelo social y que buscan todos los subterfugios para aprovecharse de un sistema basado en la solidaridad, puedan ser, sin embargo, los primeros en la cola para exigir prestaciones sociales o los primeros en la ventanilla para exigir servicios públicos".
En este sentido, el edil popular fue tajante y dijo que "uno no puede venir a Euskadi sin aceptar principios básicos de convivencia, como la igualdad en derechos y obligaciones de los hombres y las mujeres".
El edil popular comentó que el 43,6% de las denuncias por violencia de género las presentan las mujeres extranjeras -"un dato terrible", dijo, si se tiene en cuenta que el porcentaje de mujeres extranjeras supera escasamente el 9%-, "lo que significa que la mitad de las agresiones se producen en un colectivo que no alcanza el 10% de la población".
"No debemos permitir que haya ciudadanos que vivan entre nosotros y que no acepten que el hombre y la mujer son iguales o que es inaceptable el maltrato a la mujer", manifestó el alcalde, quien se preguntó si "es compatible que un ciudadano que piensa y actúa así pueda percibir de la sociedad que le acoge la solidaridad que le ofrece nuestra comunidad; yo digo que no".
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