El presidente de la Confederación Española de Federaciones y Asociaciones de Atención a las personas con Parálisis Cerebral y Afines (Aspace ), Jaume Marí, consideró este jueves que "si no se logra un gran pacto social, la reforma de la Ley de Dependencia podría quedarse en una mera iniciativa para contener el gasto".
Por este motivo, Marí señaló que es "indispensable" que administraciones públicas, agentes sociales, partidos políticos y Tercer Sector de la discapacidad alcancen un pacto social para consensuar la reforma de la conocida como Ley de Dependencia.
De no ser así, advirtió el presidente de la entidad, "se corre el peligro de que la comprensible reducción en la financiación termine afectando de forma directa a las personas con mayor grado de dependencia y acabe generando la discriminación y la desigualdad que pretende evitar".
A su entender, para lograr consensuar las iniciativas que materialicen esa reforma de la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las Personas en Situación de Dependencia, resulta "imprescindible" contar con la participación de los centros que llevan años prestando servicios de atención a las personas con discapacidad.
"Sin este gran pacto social", insistió Marí, "la reforma de la ley podría quedarse en una mera iniciativa para contener el gasto y no para la mejora de las condiciones de las personas con discapacidad o la enmienda de los errores y lagunas encontradas durante este tiempo de vigencia de la norma".
En este sentido, Confederación Aspace considera que la reforma de la ley aprobada por el Gobierno el pasado 13 de julio pone en riesgo la efectividad de la propia norma y empeorará las condiciones de vida del colectivo.
Y es que, la entidad entiende que la eliminación de los distintos niveles en cada uno de los tres grados en que se divide la situación de dependencia tiene como efecto "pernicioso" que las prestaciones asociadas de las personas con mayor dependencia se igualen a la baja.
Del mismo modo, lamentó que a la hora de ofrecer servicios de atención, no se proporcione ningún papel preponderante a las entidades del tercer sector sobre discapacidad, "las verdaderas especializadas en la atención al colectivo, con décadas de experiencia en la mayoría de los casos, primando los criterios económicos sobre la calidad".
Finalmente, Confederación Aspace puso su experiencia a disposición del Gobierno y se ofreció para colaborar con él en las iniciativas que afecten a la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las Personas en Situación de Dependencia.
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