"la Caixa mantendrá su compromiso social y es previsible que aumentemos el presupuesto a partir de 2013"

Jaime Lanaspa

Jaime Lanaspa, director general de la Fundación 'la Caixa'

Hace unos días las fundaciones la Caixa y ONCE sellaban en Barcelona una alianza estratégica de colaboración en pro del empleo y la formación de las personas con discapacidad. Se trata de un convenio que va a permitir conjugar  las potencialidades de sus respectivos programas de acción, el Programa Incorpora y el Programa Por Talento, a fin de aglutinar sus 'maquinarias' y experiencias en inserción al mercado laboral de las personas con discapacidad y avanzar en la mejora de la accesibilidad. Este convenio va a posibilitar además que 55 técnicos de Fundación ONCE participen en el curso Incorpora para técnicos en integración laboral, un postgrado de 250 horas de especialización en su tarea profesional.

Más de 38.000 personas en riesgo de exclusión, entre ellas muchas personas con discapacidades, han dado su salto al mundo laboral desde 2007 gracias al Programa Incorpora de la Fundación La Caixa. Ahora además redoblan su apuesta brindar nuevas oportunidades al talento a través de su banco social, Microbank, que ha ideado dos líneas de microcréditos dotadas en ambos casos con cinco millones de euros, expresamente creadas para atender las necesidades de los clientes con discapacidad y sus familias. Por un lado, la Línea Microcrédito Social y Financiero, que tiene por objeto financiar proyectos de autoempleo y la creación de pequeños negocios impulsados por emprendedores con discapacidad. Por otro, la Línea Microcrédito Discapacidad, pensada para atender las necesidades de mejora de la accesibilidad (reformas en las viviendas, y contratación de servicios para la autonomía, la movilidad, etc…) de las personas con discapacidad.

El máximo responsable de la Obra Social de La Caixa, Jaime Lanaspa, explica a Solidaridad Digital los objetivos y afanes de la Fundación La Caixa en un momento en plena metamorfosis de las cajas de ahorro en entidades bancarias, hecho que está despertando la inquietud de muchas organizaciones que trabajan a pie de obra en la atención a grupos sociales desfavorecidos.

A las ONG sin ánimo de lucro que trabajan en la atención directa de las personas con discapacidad les preocupa que el proceso de 'bancarización' de las cajas de ahorro acabe diluyendo el espíritu benéfico-social y solidario, que está en el ADN de estas entidades. ¿Tienen motivos para estar preocupados?

Habría que distinguir si su preocupación es a nivel general del sector o si se refiere a La Caixa. Hay que tener en cuenta que la capacidad de la Obra Social de una caja depende de si gana dinero, que es la condición necesaria para sobrevivir o no. Si las cajas de ahorro ganan dinero podrán financiar la Obra Social y seguirán haciéndola. Si no sobrevivieran, hipótesis que no parece nada probable afortunadamente, pues no podremos. Le doy mi palabra que el sector va a sobrevivir y que seguiremos haciendo obra social.

A nivel sectorial, lo que ha ocurrido en los últimos años es que ha disminuido algo el presupuesto de la Obra Social de las cajas: unos 2.000 millones de euros en los últimos dos años. Sin embargo, aunque los beneficios han sido menores, las cajas de ahorro en este país han seguido haciendo Obra Social.

¿Y en el futuro?

Es previsible que esto siga ocurriendo, que seguiremos en un bache en 2011 para empezar a recuperarnos, espero, a partir de 2012. En lo que respecta al caso concreto de La Caixa, nuestro presidente, Isidro Fainé, y toda la Dirección de la casa tiene mucho interés en mantener nuestros compromisos a pesar de la crisis, lo que quiere decir que hemos mantenido el presupuesto de la Obra Social en los últimos cuatro años, de 2008 a 2011 inclusive, con doscientos millones de euros de presupuesto. Los programas prioritarios se han mantenido o incluso reforzado en algún caso y no hemos dejado a ninguna entidad sin soporte de las convocatorias, que se han mantenido íntegramente a lo largo de los últimos años. También este y el próximo con toda seguridad, y hemos tratado de actuar si se me permite la expresión anticíclicamente, reforzando en materia de infancia, pobreza infantil, que es un programa ambicioso de Obra Social, que se llama CaixaForum: infancia, el tema de integración laboral, que es un placer, una auténtica gozada porque está consiguiendo que mejore resultados que antes de la crisis y a pesar de esta. Estamos consiguiendo mayor integración laboral de colectivos frágiles, trabajando cada vez con más entidades y más empresas que colaboran con nuestro programa, y hemos reforzado además paradógicamente, y pensando en un largo plazo, los temas de investigación. Hemos tratado en ese aspecto de poner un grano de arena para ir en contra de corriente.

¿Y en el caso concreto de la Caixa?

En lo que se refiere a la Caixa, hemos mantenido, seguimos manteniendo y en el futuro "jugaremos a empatar o ganar", como dice nuestro presidente. Es decir, nos mantendremos o aumentaremos en 2012 nuestra obra social. Lo previsible es que a partir de 2013 podamos aumentar presupuestos.

¿Qué importancia le concede Fundación la Caixa al reciente acuerdo firmado con Fundación ONCE?

Muy grande. Es de sentido común. Con ONCE nos conocemos desde hace años. La entidad financiera la Caixa, la ONCE y su Fundación somos compañeros de viaje desde hace muchísimos años. Nuestro presidente, Isidro Fainé, conoce bien esa casa y a sus directivos con quienes tiene además una cierta proximidad afectiva. Entonces, hace unos meses nos sentamos a ver qué podíamos hacer juntos, y nos centramos en el área de la integración laboral de las personas con discapacidad. Entonces si Fundación ONCE tiene experiencia, mucha experiencia, y la Fundación la Caixa desde 2007 también ha ido acumulando la suya a través del Programa Incorpora, era una colaboración natural. Si ambas entidades tienen experiencia y buenas prácticas, es de sentido común que trabajemos juntos y así reforzaremos nuestros resultados. Este es el espíritu del convenio. Luego hay cosas tan obvias... tal como está hoy el mercado laboral, la demanda se ha de satisfacer. Si cualquiera de las dos instituciones consiguen una oferta de trabajo de una empresa, hemos de conseguir que esa oferta se cubra. Si ponemos en común nuestras ofertas identificadas, optimizaremos nuestros resultados. El esfuerzo de identificación de candidatos para ofertas empresariales es clarísifmo que debemos hacerlo en común.

Momento de la firma del convenio

¿Vamos entonces hacia un engranaje de programas y equipos?

Tenemos por toda España trabajando a través del programa Incorpora a entidades expertas en gestionar soportes a colectivos frágiles. Si incorporamos a esa red a entidades de la Fundación ONCE, ampliaremos la potencia y la eficacia de la red. Una cosa que me parece elemental. Una de las claves del éxito del Programa Incorpora es que añade el elemento de formación. Y es relevante porque son 250 horas de formación las que ofrecemos a técnicos en integración laboral. Con el convenio que hemos firmado, abrimos la oportunidad de que técnicos de la Fundación ONCE asistan a estos cursos, y seguro que mejoramos en capacitación profesional y, en consecuencia, la eficacia de los programas de inserción. Ambas entidades tenemos una buena experiencia y resultados positivos en materia de inserción laboral. Trabajar juntos significará mejorar los resultados.