El programa Inserta de la Fundación ONCE ha obtenido unos resultados excelentes con la incorporación en la plantilla de grandes empresas de casi 3.000 personas con discapacidad, un logro casi impensable cuando se puso en marcha hace doce años, según destacó "Expansión".
No hay excusa que valga. Aquellas empresas que hoy no cuentan con al menos un 2% de empleados con algún tipo de discapacidad en su plantilla es porque no quieren. La existencia de programas como Inserta, de la Fundación ONCE, demuestra que la integración laboral de este colectivo es posible y, además, tiene éxito. Desde que se puso en marcha en 1997, casi 3.000 personas con algún tipo de discapacidad han sido contratadas por las 97 empresas que se han adherido al programa a lo largo de este tiempo.
Hoy el convenio está vigente con 35 compañías. Cada empresa que firma un acuerdo Inserta se compromete al desarrollo de acciones que hagan posible la inserción laboral directa de discapacitados en su plantilla, así como la ejecución de medidas que contribuyan a la mejora de sus condiciones de vida. Accenture, Acciona, Alcampo, Axa, Banco Popular, Repsol, BBVA, Carrefour, Coca Cola, El Corte Inglés, Siemens y un largo etcétera de empresas españolas colaboran con el programa Inserta. "Los compromisos son rigurosos. Nosotros analizamos detalladamente el perfil de cada empresa para ver qué actuaciones se pueden llevar a cabo", afirma Josefa Torres, directora de formación y empleo de la Fundación ONCE. Torres valora de forma positiva los resultados del programa: "Es un instrumento que funciona y que ha ayudado a muchas compañías a llegar a ese 2%, e incluso a superarlo. Nos ha sorprendido mucho el compromiso de todos los participantes".
Ejemplos de éxito
La integración de personas con capacidades diferentes es uno de los principales objetivos de Repsol. La compañía firmó un convenio en noviembre de 2006 por un periodo de tres años. A través del acuerdo, la compañía adquirió el compromiso de incorporar a 150 personas. "En diciembre de 2005 trabajaban en el grupo 189 personas con discapacidad, en diciembre de 2008 eran ya 405, y en lo que va de año hemos realizado 32 nuevas contrataciones. Nuestra meta es mantener como mínimo el porcentaje del 2% (actualmente estamos en el 2,22%)", explica Lola Estrada, directora de relaciones laborales de la compañía.
Para Acciona, la gestión del empleo de personas con discapacidad no es sólo una obligación legal sino un reflejo de su responsabilidad social: "Queremos ser el cauce para la integración laboral de colectivos desfavorecidos. En este sentido, hemos querido diferenciarnos de nuestros competidores desarrollando acciones enfocadas a potenciar el empleo de discapacitados, promoviendo las buenas prácticas laborales y de integración", asegura Juan Manuel Cruz, director general del área de administración de recursos humanos de Acciona.
La compañía se ha fijado el objetivo de alcanzar el 3% de empleados con discapacidad durante los próximos años: en 2006 tenía un 2,17%, mientras que a finales de 2008 contabilizaba un 2,44%. Además de ingenieros técnicos de informática, auxiliares administrativos, gestores de incidencias, limpiadores y peones de jardinería, Acciona está dando prioridad a las personas con especiales dificultades de trabajo para cubrir puestos no sanitarios en el Hospital Infanta Sofía de Madrid. De las 115 personas incorporadas, un 9% tiene algún tipo de discapacidad.
Otro ejemplo de éxito es Carrefour. En 2008 se incorporaron 150 empleados a través de Inserta, lo que supone un 75% del total de personas con discapacidad contratadas el año pasado. "Este programa es la principal fuente de reclutamiento en la integración laboral de este colectivo. A 30 de abril de 2009, 880 personas con discapacidad trabajan con nosotros, lo que supone el 2,1% de la plantilla total", afirma Guillermo de Rueda, director de relaciones institucionales de la compañía. "Su contratación forma parte de la normalidad de una empresa que quiere implicarse en la sociedad", concluye.