La Comisión Europea acaba de elaborar una guía de compra pública socialmente responsable, que estará próximamente disponible para todo el público, según ha anunciado Lasló Andor, comisario de Empleo y Asuntos Sociales, en la inauguración del Foro Europeo Multistakeholder sobre responsabilidad social.
Andor afirmó en su intervención que los procedimientos públicos de compra pueden promover la responsabilidad social a través de múltiples maneras desde el acceso a la salud básica y seguridad laboral en los lugares de trabajo, o asegurando los derechos humanos en la cadena de suministro, informa Servimedia
El responsable comunitario afirmó que la responsabilidad social tiene un papel sustancial en la recuperación económica, “restaurando el crecimiento sostenible”. Además hizo un llamamiento para que todos los sectores, y en concreto el financiero, tengan un comportamiento más ético como resultado de la crisis.
Por su parte, la patronal europea Business Europe también considera que la Comisión puede promover la responsabilidad social entre las empresas a través de la promoción de las buenas prácticas.
Esta promoción debería hacerse con incentivos para las compañías y el desarrollo de un marco que permita el desarrollo de la RSC. “Debería ser más de ayuda que de elaboración de unas normas estrictas y detalladas que las empresas deberían cumplir”, afirma el documento presentado por la patronal.
Entre las sugerencias que hacen figuran la creación de un premio europeo, la creación de un punto central de contacto para los temas de responsabilidad social en la comisión Europea, y la elaboración de un nuevo enfoque que no ponga a las empresas como su principal objetivo.
Sobre este último aspecto, afirma que se tienen que identificar las principales áreas donde existen problemas para que todos los grupos de interés desarrollen juntos una solución a los mismos.
Los sindicatos europeos, agrupados en ETUC, creen que las empresas deben ofrecer información sobre los planes de reestructuración, la cadena de suministros, los sistemas de retribución de los directivos.
En cuanto a la Comisión Europea afirman que ésta debería desarrollar un marco regulatorio que defina los criterios por los cuales las empresas puede ser consideradas socialmente responsables en sus operaciones de negocio.