La contaminación de los coches eleva el riesgo de trastorno ocular en mayores de 50 años

Contaminación

La exposición a largo plazo a los contaminantes que salen de los tubos de escape de los vehículos está relacionada con un mayor riesgo de degeneración macular asociada con la edad (DMAE) entre las personas mayores de 50 años. Así se desprende de un estudio liderado por investigadores taiwaneses y publicado en la revista 'Journal of Investigative Medicine', donde se desprende que ese riesgo casi se duplica para ese sector de la población.

La DMAE es un trastorno ocular que destruye lentamente la visión central y aguda, lo cual dificulta la lectura y la visualización de detalles. Se trata de una afección neurodegenerativa que afecta a la parte media de la retina, conocida como mácula, y es una de las causas más comunes de mala visión en las personas mayores, probablemente debido a una interacción entre factores de riesgo genéticos y ambientales.

La exposición a largo plazo a la contaminación del aire se ha relacionado con un mayor riesgo de varias afecciones, incluidas las enfermedades respiratorias y cardiovasculares, pero se sabe menos sobre sus posibles efectos sobre la salud ocular.

Para explorar esto más a fondo, investigadores taiwaneses analizaron el seguro de salud nacional y los datos de calidad del aire de 1998 a 2010 para verificar si podría haber un vínculo entre la exposición a largo plazo a los contaminantes dióxido de nitrógeno (NO2) y monóxido de carbono (CO) y un aumento riesgo de DMAE.

Como esta afección es más común entre los grupos de mayor edad, los investigadores se centraron en 39.819 personas de 50 años o más, la mayoría de las cuales vivían en áreas alta o moderadamente urbanizadas (30 y 32,5%, respectivamente).

Debido a que hay variaciones estacionales en los niveles de contaminantes del aire, los investigadores calcularon una exposición anual promedio, que se clasificó en cuatro niveles diferentes. Durante el periodo de análisis, un total de 1.442 personas desarrollaron DMAE.

Después de tener en cuenta los factores potencialmente influyentes, como la edad, el sexo, los ingresos del hogar y las enfermedades subyacentes, las personas con mayor nivel de exposición al NO2 (más de 9.825,5 partes por billón) tenían casi el doble de probabilidades (91%) de desarrollar DMAE que las expuestas al nivel más bajo (menos de 6.563,2 partes por billón).

Y las personas que estuvieron expuestas al nivel más alto de CO (más de 297,1 partes por millón) tenían un 84% más de probabilidades de desarrollar DMAE que las expuestas al nivel más bajo (menos de 195,7 partes por millón).

La tasa más alta de degeneración macular asociada con la edad recién diagnosticada (5,8%) fue entre las personas que viven en el área con el nivel más alto de exposición al CO.

Para los investigadores, este estudio es el primero que demuestra "una asociación significativa entre la DMAE y altos niveles de NO ambiental y CO".