El diálogo, clave para la sostenibilidad de las reformas sociales y económicas

Comisario Andor

La crisis, las reformas, los recortes...las actuaciones gubernamentales emprendidas por los gobiernos de la Unión Europea (UE) en los últimos años "no han ido siempre acompañadas de un diálogo social eficaz, lo que ha llevado a relaciones laborales cada vez más conflictivas en Europa", afirma la Comisión Europea (CE) en un informe publicado hoy que concluye, en definitiva, que hablando se entiende la gente.

La crisis ha puesto a prueba el diálogo entre los representantes de trabajadores y de los empresarios y los gobiernos. Así lo entiende László Andor, Comisario de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión, quien ha declarado que "el diálogo social está sometido a una presión creciente en el actual contexto macroeconómico de caída de la demanda, aumentos de impuestos y recortes en el gasto público".

Para Andor, la clave para impulsar la salida de la crisis se encuentra en "reforzar el papel de los interlocutores sociales a todos los niveles y mantener los beneficios que brinda el modelo social europeo. Un diálogo social bien estructurado es indispensable asimismo para enfrentarse al reto que supone el cambio demográfico y para garantizar mejores condiciones laborales y una mayor cohesión social. El diálogo social debe reforzarse en los Estados miembros de Europa Central y Oriental, en los que hoy en día está bastante menos desarrollado".


CUESTIÓN DE CONFIANZA

La CE constata en su informe que, por lo general, la población tiende a confiar y a aceptar más fácilmente las soluciones consensuadas entre los interlocutores sociales, lo que, a su vez, favorece la puesta en práctica de una manera "menos conflictiva" y más sostenible a largo plazo de las medidas acordadas.

"La participación de los representantes de trabajadores y empresarios en las reformas gubernamentales es vital. El diálogo social bien estructurado puede contribuir de forma eficaz a la resistencia económica de Europa", destaca. Es más, la CE afirma que "el potencial de resolver problemas que tiene el diálogo social puede ayudarnos a superar la crisis actual".

Otra de las conlusiones extraídas por la CE es el "efecto palpable" en la vida laboral de los ciudadanos que tiene un buen y consolidado diálogo social. Efecto que se ha traducido en una mejora la salud y la seguridad en el trabajo y las condiciones laborales, por poner sólo un ejemplo.
 

SECTOR PÚBLICO

El sector público ha sido un buen espejo a la hora de reflejar los efectos positivos derivados de acuerdos consensuados entre trabajadores, empresarios y gobierno. Así, y como consecuencia de la crisis y de la necesaria reestructuración interna, algunos Estados comunitarios han recurrido a los recortes en el gasto público, que han impactado dirctamente en la administración pública, la educación y la asistencia sanitaria. En los países en los que las soluciones han sido acordadas en convenio colectivo entre los sindicatos y el sector público, el proceso de reformas ha seguido "un enfoque más equilibrado y un conflicto más reducido", manteniendo un margen para las soluciones consensuadas.

Sin embargo, "en otros lugares, los métodos elegidos para aplicar las decisiones a menudo han descartado el diálogo social. Como consecuencia de ello, en muchos Estados miembro el aumento de los impuestos y la reducción del gasto público han provocado una oleada de conflictos laborales y han acentuado el rechazo de algunas de las reformas adoptadas fuera del diálogo social".

 

 

Nathalie Domínguez / Fuente: CE