Ofrece representaciones 16, 17 y 18 de mayo en el Teatro Lagrada de Madrid a partir de las 20.00 horas
Redacción
‘Diversas Mujeres’ son diez actrices, con discapacidad intelectual y sin ella, que este jueves se subirán a un escenario sin maquillaje. Asumen el reto sólo “con la belleza de la diferencia”, como le gusta decir a la creadora de la compañía de teatro inclusivo, Vertebradas Artes Escénicas. Diez mujeres de entre 8 a 78 años con sus diversas vivencias “que forman un solo organismo vivo, un corazón que palpita al unísono”.
Laura Suárez lleva dos décadas años trabajando con la discapacidad trasladada a las artes escénicas inclusivas. Todo comenzó cuando la invitaron a impartir un taller en la Asociación Rudolf Steiner, donde participan personas con discapacidad intelectual y del desarrollo. Aquello cambió su vida y su mirada.
Así en 2015 puso en marcha en Madrid el Taller de Teatro Inclusivo Permanente y, un par de años más tarde, nació Vertebradas Artes Escénicas, una compañía teatral inclusiva. A Laura le gusta trabajar desde la improvisación en sus talleres de teatro porque “allí se encuentra el germen de todo”, explica en una entrevista a Servimedia. La dramaturga lo llama “el teatro de la experiencia”, que guarda relación con “entrar en contacto con las capacidades propias y descubrir las del otro”.
LA INCLUSIÓN A ESCENA
Además, la directora decidió lanzar una productora teatral, LauraEnÓrbita, que se centra en la inclusión, la escena interdisciplinar y el método del teatro de la experiencia. “Nuestra base de trabajo consiste en visibilizar lo que cada una de estas personas aporta a la sociedad. Siempre hablo del valor de la diferencia porque hay muchísimas maneras diferentes de hacer las cosas”, reitera.
La compañía surge del Taller de Teatro Inclusivo permanente que dirige Laura Suárez “experimentando en técnicas de actuación y en la creación colectiva”. La actriz y directora apunta que el lenguaje escénico de nuestros espectáculos “es el reflejo de dicha investigación y del fruto de casi 20 años de trabajo ininterrumpido con personas con discapacidad”. Un lenguaje transversal donde "cada una de las intérpretes puede expresarse desde sus capacidades", cualidad inherente al término 'inclusión', y que enriquece de manera sensible la expresión grupal.
La compañía Vertebradas Artes Escénicas tiene en la actualidad tres obras en gira, todas ellas dirigidas por Laura: '¡Molinos ¡a mí!' y 'Baila el bosque' y 'Diversas Mujeres'. Este jueves, viernes y sábado a las 20.00 horas, ‘Diversas mujeres’ recorren el escenario del madrileño Teatro Lagrada compartiendo experiencias únicas a través de un lenguaje común. “Lo hacemos por una inclusión que nos permite soñar nuevos futuros colectivamente", relata.
Laura se muestra orgullosa de contar con un elenco de artistas con y sin discapacidad, pero además la inclusión llega también al equipo técnico de montaje. “Hasta el diseño gráfico”, es decir la cartelería de la página web, “lo ha elaborado una empresa sevillana, Casa de Carlota, en la que trabajan personas con discapacidad intelectual. Esto viene a demostrar que el mundo está capacitado para para crear y expresarse”, asevera.
DIVERSAS ACTRICES
Esta decidida mujer huye de etiquetas como ‘teatro de amateurs’ o ‘funciones para la beneficencia’. “Hacemos teatro de una manera muy rica y especial”, defiende la dramaturga. “Cuando se habla de obras inclusivas siempre se tiende a pensar en un teatro no profesional, sin pararse a pensar el mucho trabajo y las muchas horas de formación que hay detrás de estos intérpretes, que se preparan de forma concienzuda para mostrar un trabajo de calidad sobre el escenario”.
Llama la atención la variedad de edades, la presencia de distintas generaciones sobre las tablas. “Artistas diversas cuyas edades oscilan entre los 8 y los 78 años transitarán a través de diferentes paisajes emocionales “, explica Laura.
Precisamente Carol McEvoy es la más longeva y también una de las actrices “más agradecidas” por formar parte de esta amalgama de feminidades. “Hace cinco años que participo en esa compañía y para mí es un enriquecimiento trabajar con personas que presentan alguna discapacidad”, confiesa esta estadounidense que lleva más de 50 años viviendo en España. “Admira su dedicación. Son todos estupendos; y cuando estamos sobre el escenario ya no ves la discapacidad. Somos todos uno. Somos una gran familia”.
Marta Sancho forma parte de ‘este organismo único’ compuesto de mujeres diferentes. Ella tiene una discapacidad intelectual y de sus 56 años lleva 20 implicada “en esto del teatro de la mano de Laura”, relata para Servimedia. “No estoy nerviosa, aunque reconozco que impone más subirse al escenario que un simple taller de teatro”. Reconoce que dedicarse al teatro le permite conocer a muchas más personas y, concretamente, en esta obra, le encanta la niña pequeña de ocho años “que es una monada”.
La creadora de este proyecto encuentra muy positivo la capacidad del teatro como herramienta que permite “la inclusión real de un colectivo especialmente desfavorecido dentro de la discapacidad, que es el de las personas mayores con discapacidad intelectual”. María del Carmen, Luna, Marisol, Zoe, Laura, Carol, Alena, Marta, Zoe y Laura: diez mujeres diversas pero que comparten algo en común, su pasión por la interpretación.