Fundosa Social Consulting de Castilla –La Mancha junto con la Escuela universitaria de Magisteriohan organizado las primeras Jornadas Universitarias de la Discapacidad en Toledo.
Los ministros europeos de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumo (EPSCO ) han adoptado diversas conclusiones en materia de empleo, recuperación económica y financiera, igualdad de género, salud y dignidad de las personas mayores, en el contexto de la Estrategia de Lisboa.
En materia de baja por maternidad y paternidad, el Consejo ha acordado ampliar la misma a cuatro meses incluyendo los casos de adopción y bebés que nacen con algún tipo de discapacidad o padecen una enfermedad prolongada, evaluando y teniendo en cuenta, en estos últimos casos, las necesidades específicas de estos padres. Esta directiva modifica a la actual.
Eso sí, la directiva advierte de que los cuatro meses son aplicables tanto a la madre como al padre y que ninguno de estos meses podrá ser transferido al otro cónyuge, por lo que recomienda a ambos padres disfrutar de la totalidad de este periodo.
En materia de contratos de trabajo, Europa establece que estos derechos de baja se apliquen por igual a todos los trabajadores independientemente de su modelo de contrato, ya sea a tiempo parcial, temporal, interino o de otro tipo. Además, ofrece la posibilidad de prever un periodo de hasta un año de baja maternal o paternal que deberá ser mantenido a su regreso.
El trabajador podrá, igualmente, solicitar a la empresa un cambio temporal y limitado de su horario para atender las necesidades derivadas de esta baja, que el empresario estará obligado a cumplir.
En cualquier caso, la directiva dejará en manos de los Estados y agentes sociales nacionales las cuestiones relativas a la remuneración de los empleados durante la baja.
En materia de igualdad de género en el trabajo, los ministros adoptaron diversas conclusiones que subrayan el fuerte vínculo que existe entre la igualdad, el crecimiento económico y el empleo. Los Estados miembros consideran urgente los temas relativos al cuidado de los hijos y la reducción de la diferencia salarial.
Durante la sesión, el Consejo debatió sobre las medidas que deberían adoptarse para evitar la fuerte recesión y su impacto negativo sobre el empleo.
El reto del envejecimiento europeo también se incluyó en la agenda, en la que se solicitaron medidas específicas, como la ampliación de la oferta laboral a largo plazo, evitar la exclusión, y la colaboración de las partes implicadas en el mercado de empleo. Además, el Consejo ha insistido en dar prioridad a la persona como individuo y mejorar la cooperación urgente entre los sectores sociales y de atención sanitaria con el fin de garantizar la dignidad en el cuidado de las personas mayores.
Con el fin de superar la crisis económica y financiera, el Consejo ha recomendado un mercado laboral inclusivo en combinación con una política activa de seguridad social.
Nathalie Domínguez