El Gobierno presenta la reforma laboral

Reforma Laboral

La reforma laboral aprobada la semana pasada por el Gobierno establece la desaparición del llamado despido exprés, que permitía al empresario despedir a un trabajador pagando directamente la indemnización prevista en el caso de ceses improcedentes.

Así lo explicaron fuentes del Ministerio de Empleo y Seguridad Social Abre nueva ventana, que señalaron que, de esta forma, el empresario deberá de justificar todos los despidos, por lo que pagará al empleado la indemnización de 20 días por año trabajado con un máximo de 12 meses que corresponde a los ceses procedentes.

Posteriormente, el trabajador, si no está de acuerdo con esta indemnización, podrá denunciarlo ante la autoridad judicial, y será el juez el único que pueda decidir que el despido sea improcedente, lo que conllevaría el pago de 33 días por año, o 45 días en el caso del periodo previo a la entrada en vigor de la reforma.

Desde el Ministerio subrayaron que la desaparición del despido exprés es lógica ya que, de lo contrario, "no tendría sentido eliminar la autorización administrativa previa" en los expedientes de regulación de empleo (ERE).

Con estas medidas, se equipara el despido individual y el colectivo, con la única diferencia de que en el caso de un ERE hay un periodo obligatorio de consultas entre la empresa y los representantes de los trabajadores.

En ambos casos, el empresario sólo tendrá que justificar los despidos y es decisión de los trabajadores si llevan el caso al ámbito judicial.

El Ejecutivo defiende que este tipo de "despido exprés" no era "beneficioso ni para el empresario ni para el trabajador".

Ni en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en la que la responsable de Empleo informó sobre la reforma, ni en la nota de prensa que acompañó dicha comparecencia, el Gobierno informó sobre su decisión de eliminar la figura del "despido exprés".

Por su parte, el ministro de Economía y Competitividad Abre nueva ventana, Luis de Guindos, afirmó este lunes que la reforma laboral es "agresiva con las causas que han llevado a que España sea el peor país" en materia de trabajo y "ambiciosa de cara a la contratación futura", y consideró que "era imprescindible una modificación sustancial de nuestra regulación laboral".

Además, aseguró que la reforma supone "un antes y un después", y subrayó que "va a producir efectos positivos a medio plazo, sin duda, sobre la economía española".

En una entrevista en la Cope recogida por Servimedia, el ministro aseguró que la reforma laboral es "una pieza muy importante de la estrategia global de la política económica del Gobierno", y señaló que se está "recuperando el tiempo perdido".

Para el responsable de Economía, con la reforma se prima el empleo, y aseguró que "no he encontrado todavía a ningún empresario que quiera echar a sus trabajadores".

"La reforma va a permitir en última instancia, y no es una cuestión inmediata, incrementar la productividad y la competitividad de la economía español", dijo el ministro.

De Guindos apuntó que el Ejecutivo ha tenido que tomar medidas que "no han sido plato de gusto" y que han sido "impopulares", aunque explicó que se han adoptado "arrastrados" por la situación económica, "pero es que no teníamos otro remedio". Además, el responsable de Economía indicó que el "impulso reformista tiene que durar en los próximos meses".

Preguntado por si el Ejecutivo tocará de nuevo los impuestos al alza, el ministro indicó que "creo que este año no va a haber subida de impuestos adicionales".

 

Servimedia