El Gobierno reconoce que incumplirá el objetivo de déficit en 2012 y 2013

Déficit

El Gobierno de Mariano Rajoy tiene asumido que el año acabará sin cumplir el objetivo de déficit del 6,3% marcado por la Unión Europea para 2012 y que mucho menos lo hará en 2013 como consecuencia de la recesión generalizada en la que está a punto de entrar el continente.

Fuentes del Ejecutivo reconocieron a Servimedia que este mes de diciembre finalizará con el déficit público cercano al 7%, en la línea adelantada este fin de semana por el comisario de Economía de la UE, Oli Rehn.

Tanto en Madrid como en Bruselas dan por hecho que España superará varias décimas el compromiso que Rajoy adquirió ante sus colegas comunitarios a mitad de año, cuando la UE decidió suavizar el objetivo de déficit público para 2012.

Inicialmente, el Gobierno estaba obligado a reducir el desvío del gasto al 4,4% pero la UE le dio un margen mayor a Rajoy al comprobar que la herencia que el líder del Partido Popular había recibido del socialista José Luis Rodríguez Zapatero era mucho peor de lo esperado.

España tendría que haber cerrado el ejercicio 2011 con un déficit del 6% pero el despilfarro en la Administración General del Estado y, sobre todo, en las comunidades autónomas disparó la cifra definitiva hasta el 8,51%. Cuando la UE verificó este dato en marzo, concedió mayor margen a Rajoy. Primero le marcó el reto de reducir el desequilibrio al 5,3% y, al final, le concedió otro punto más para dejar el objetivo definitivo en el 6,3%.


RECORTES SIN EFECTO

El Gobierno admite que, pese a los esfuerzos realizados para disminuir el gasto y el gran número de recortes sociales acometidos, el déficit de 2012 rondará el 7%. Dentro del Gobierno, se estima que la cifra final será del 6,9% o 6,8% si el consumo alcanza estas navidades sus expectativas y, sobre todo, si las comunidades autónomas hacen correctamente sus deberes.

El mayor desajuste se producirá en la Seguridad Social, como consecuencia del incremento del paro y la pérdida de cotizantes. El Ejecutivo cree que la Administración General del Estado acabará con un déficit del 4,5%, las comunidades con un 1,5% y la Seguridad Social cerca del 1%. En total, alrededor del 7% en 2012, en lugar del 6,3% prometido.

El gabinete de Rajoy es consciente hace semanas de que el déficit será más alto de lo pretendido por la UE, aunque el discurso oficial ha sido otro hasta la celebración de las elecciones autonómicas en Cataluña. Durante todo el otoño, el Ejecutivo repetía una y otra vez que cumpliría el objetivo pero las palabras han cambiado tras la última cita con las urnas.

La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, introdujo un matiz el viernes cuando anunció tras el Consejo de Ministros que las pensiones de este año no se actualizarían y, como consecuencia, que los jubilados perderían poder adquisitivo.

Bánez alegó que, gracias a esa decisión, las arcas públicas podrían ahorrar un gasto al que Rajoy se había comprometido y el Estado se mantendría "en la senda de cumplimiento del objetivo de déficit público". Compensar a los pensionistas por el incremento del IPC en 2012 implicaba un coste de 1.900 millones en este ejercicio, lo que habría elevado el déficit público en otras dos décimas.

Al desechar esa opción, el Gobierno espera cerrar el año con un desvío en torno al 7%, pero sin alcanzar esta cifra psicológica para no dar la sensación de que ha sido incapaz de controlar las cuentas del Estado y de las comunidades autónomas. Algo así, reconocen las fuentes consultadas por Servimedia, sería nefasto para la imagen del país y para la credibilidad exterior del propio Rajoy.

Si el déficit se queda en el 6,9% o por debajo, el presidente del Gobierno alegará ante la UE que ha realizado un gran esfuerzo para rebajar el desfase del gasto público en más de 20.000 millones de euros. Aunque no alcance del todo la meta que le impusieron sus socios, presumirá de haber corregido el despilfarro del 8,51% que encontró al llegar a La Moncloa y de haber ido en apenas doce meses mucho más allá que Zapatero en dos años.


DESFASE TOTAL EN 2013

Las cosas pintan peor para el próximo año, cuando el Gobierno tendría que reducir el déficit público al 4,5%. No sería demasiado difícil si 2012 terminase en el objetivo del 6,3%, pero ahora que sabe que lo incumplirá en más de medio punto.

Las mismas fuentes aseguraron a Servimedia que el Estado sobrepasará con creces los plazos para equilibrar las cuentas públicas de las distintas administraciones. En 2013, rondarán el 6% de déficit, por lo que apenas se espera que recorten un punto respecto 2012.

El Ejecutivo sostiene que la recesión económica en la que están entrando el resto de los países de la UE afectará negativamente a España e impedirá que vaya más allá en la restricción de su política fiscal.

Las instituciones comunitarias son conscientes de esta situación y, por eso, han adelantado que no pedirán a España nuevos esfuerzos ni recortes. Con las medidas adoptadas hasta el momento, basta, aunque el Gobierno ha utilizado a lo largo de este año las mismas palabras en varias ocasiones y luego ha acabado metiendo la tijera.

En el gabinete de Rajoy creen que, si la UE es flexible con España respecto al déficit, al menos podrá hacer realidad las previsiones de que la recesión económica irá a menos y el Producto Interior Bruto sólo caerá un 0,5% en 2013, en vez del 1,3% que las mismas fuentes aseguran que se contraerá en 2012.

Los asesores económicos de Rajoy creen que Europa ha asumido al fin que la política de austeridad sin control sólo contribuye a frenar la economía y, por eso, esperan que al año que viene suavice los objetivos de déficit para evitar que la recesión vaya a más. Se trata de priorizar el objetivo del PIB por encima del objetivo de déficit.

En este contexto, el Gobierno espera comenzar a crear empleo a partir del segundo trimestre de 2013, de manera que la Encuesta de Población Activa del mes de julio refleje una reducción del paro y abra un nuevo escenario para que el país entero salga de la recesión y el PIB comience a crecer en 2014, como quiere y vaticina Rajoy.

 

 

Servimedia