El filósofo, pedagogo y catedrático José Antonio Marina, autor del borrador del 'Libro Blanco sobre la Función Docente no Universitaria' por encargo del Ministerio de Educación , asegura que en cinco años España podría pasar de ocupar un puesto mediocre en las clasificaciones PISA a tener un sistema educativo de alto rendimiento.
Para conseguirlo, propone un plan basado en cinco objetivos, según expuso en un encuentro informativo organizado en la agencia de noticias Servimedia.
España podría "tener en cinco años un sistema educativo de alto rendimiento, equiparable al de Finlandia, por poner un ejemplo muy conocido", subrayó el experto.
Indicó que los resultados educativos no son tan malos. "Estamos en la media de la OCDE, cuando se considera a España entera como Estado", dijo en referencia a los resultados de los Informes PISA, que evalúan el rendimiento de los alumnos de 15 años en los países miembros de la OCDE y otras naciones, en los que los escolares españoles no salen bien parados.
En opinión de Marina, esa "no es la mejor situación, en un mundo que va a ser muy competitivo". Sin embargo, explicó, "en las clasificaciones por comunidades autónomas hay algunas que están muy bien situadas, como La Rioja, Navarra, Castilla y León y Madrid".
Para lograr la mejora de la calidad de la educación en toda España, según Marina, bastaría con dedicar a ello el 5% ciento del PIB. "Según todos los datos que manejamos, creo que eso es suficiente y viable. Si pensamos que tenemos que tener el 7%, como está diciendo algún partido político, no vamos a mejorar nunca en educación porque no vamos a tener ese porcentaje en los próximos 10 años", apostilló.
'PLAN 5 5 5 '
La clave para avanzar hacia ese sistema educativo de alto rendimiento es lo que el filósofo denomina el "plan 5 5 5", porque propone alcanzar en los próximos 5 años "5 objetivos mensurables", ya que "lo que no se mide en educación no sirve para nada", dedicando a ello el 5% del PIB, explicó.
El primero de esos objetivos sería "disminuir nuestra bochornosa tasa de fracaso escolar al 10 por ciento, que es lo que nos pide la UE", subrayó Marina. Aunque esta tasa ha bajado en los últimos años del 30 al 21 por ciento, ha sido "por cuestiones accidentales, ya que muchos chicos y chicas que se fueron de la escuela porque encontraron trabajo ahora vuelven porque no tienen empleo", señaló.
El segundo objetivo sería subir 35 puntos en la clasificación PISA, algo que en opinión de Marina "es viable" porque lo han hecho países como México, Polonia y Corea del Sur, y en España la Comunidad Foral de Navarra "en dos años ha subido 20 puntos".
Para garantizar que todos los alumnos se beneficien de estos cambios, el filósofo considera imprescindible "ocuparnos de una manera eficiente y justa de los chicos y chicas con necesidades especiales, bien por dificultades o por altas capacidades", y "reducir las diferencias entre alumnos excelentes y malos alumnos", tercera y cuarta meta a conseguir en el próximo lustro, dijo.
Por último, habría que integrar en el sistema lo que "empieza a llamarse destrezas del siglo XXI", que consistirían, según explicó Marina, en "un aprendizaje profundo, muy flexible, que se pueda acomodar a saberes distintos", y con el que se preparará a los jóvenes "para este mundo cambiante, en el que chicos y chicas van a tener que aprender continuamente", concluyó.
Servimedia