Si quieren levantar un negocio de la nada tengan mucho cuidado y asegúrense antes un buen respaldo económico porque la situación crítica internacional -que no nos es desconocida- está pasando factura, principalmente, a las pyme. Así lo avisa la OCDE , que sigue constatando un diferencial cada vez más elevado por tamaño de empresa a la hora de acceder a un crédito.
La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), ha elaborado un informe en el que alerta de las cada vez más profundas discrepancias producidas entre las grandes y pequeñas empresas a la hora de acceder a un préstamo, y de las graves consecuencias derivadas de ello.
En una nota de prensa, la OCDE asegura que el estudio "La Financiación de las pyme y del empresariado 2012: un marcador de la OCDE", pone de relieve que a este tipo de empresas que adquirieron un préstamo entre los años 2007 y 2010, se las somete a unos tipos de interés muy superiores a los aplicados a las grandes compañías por no mencionar las importantes garantías adicionales exigidas.
Pese a la tendencia de los tipos de interés acordados a los préstamos para las pyme hayan tendido a la baja durante la crisis financiera, las diferencias entre éstas y las grandes empresas se han profundizado incluso durante la breve recuperación del año 2010.
¿Por qué sucede esto? Según la OCDE, la respuesta a esta pregunta se basa en una cuestión de desconfianza. "Las condiciones de crédito más favorables acordadas a las grandes compañías lleva a pensar que las pequeñas empresas eran consideradas como de alto riesgo y con perspectivas comerciales más mediocres", apunta el informe.
¿Es cierto? No. El informe desmiente estos prejuicios y pone en valor el papel que las pyme juegan en la sociedad. Para la OCDE, las pyme son el motor "para el crecimiento económico, la creación de empleo y la cohesión social". De hecho, en numerosos países, representan el 99% del total de las empresas.
El acceso a la financiación, señala el organismo internacional, permanece así como una de las grandes dificultades encontradas por las pyme a lo largo de toda su vida, tanto para su creación, como para el desarrollo de su actividad y crecimiento.
La fuerte caída de la demanda de bienes y servicios producida durante la crisis, unida a las exigentes condiciones crediticias, han golpeado de frente a la tesorería y a la liquidez de las pyme, provocando retrasos en los pagos, y numerosas empresas han tenido que cerrar, alimentando aún más si cabe la tasa de paro de numerosos países.
Con este informe, la OCDE quiere mejorar el conocimiento de las necesidades de financiación de las pyme, ayudar a concebir y a evaluar la acción pública en esta materia y a supervisar las consecuencias de las reformas del sector financiero sobre el acceso a la financiación de las pyme.
Nathalie Domínguez
Fuente: OCDE