ONCE, una entidad comprometida con la igualdad

Sabina Lobato

La igualdad en la ONCE Abre nueva ventana no es cuestión de modas ni de cumplir mínimos reglamentarios. Se trata de una “seña de identidad”, tal y como aseguró la vicepresidenta de la institución recientemente, Teresa Palahí:  “La cuestión de igualdad no es una cuestión de mujeres, sino algo que atañe a todos. Por eso, además de ser un ejemplo de diversidad y de inclusión, la ONCE también es un referente en cuanto a la paridad en su pleno del Consejo General de la ONCE y de su fundación”.

Y fruto de esa política interna ha llegado el reconocimiento, con el distintivo “Igualdad en la Empresa 2012”, concedido a la Fundación ONCE Abre nueva ventana y Grupo Fundosa Abre nueva ventana por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad Abre nueva ventana.

Esta insignia es una marca de excelencia que reconoce a las entidades que mejor aplican medidas y políticas de igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres en el ámbito laboral. Se convoca anualmente y tiene una vigencia de tres años, periodo en el que  la Dirección General para la Igualdad de Oportunidades –órgano dependiente del Ministerio y que gestiona la convocatoria- solicita a las entidades distinguidas un informe anual de actividades sobre este ámbito para constatar que mantienen el mismo nivel de excelencia.

La ONCE se siente satisfecha de la concesión, y valora el hecho como “muy bueno”, según palabras de la directora de Empleo, Formación y Proyectos, Sabina Lobato. “Desde la ONCE ya se impulsó un Observatorio para la igualdad de género. Ésta es una de las líneas de trabajo, el tema de la prevención y violencia de género, la atención a posibles víctimas de la violencia. La cuestión de género es algo en lo que ya veníamos trabajando, no sólo en Fundación ONCE y Grupo Fundosa, sino en toda la organización en su conjunto”.

La ayuda inmediata e integral a la mujer víctima de violencia de género es uno de los compromisos adquiridos por ONCE desde hace tiempo. Cuando se detecta un caso “se despliega todo tipo de apoyos y se les garantiza su empleo, haciéndolo compatible con su situación personal”, apuntó Lobato.

Asimismo, la ONCE “es una organización receptora de mujeres que, habiendo sido víctimas de la violencia de género, están en situación de desempleo, de manera que pueda contribuir a reconstruir su vida contando con un empleo”, apostilla Lobato.

De hecho, la ONCE cuenta con distintos protocolos que se adecúan a las diferentes situaciones por las que puede atravesar una mujer en estas condiciones. “En las líneas de trabajo que tenemos, en cuanto al diseño del itinerario, si hay alguna circunstancia que rodea a alguna posible demandante de empleo que proceda de un ámbito de violencia de género, o venga derivada de algún servicio, lo que hacemos es reforzar las redes de cooperación con otras entidades”, observa la directora de Empleo, Formación y Proyectos.

Lo importante es, por medio de convenios firmados por la ONCE con otras entidades, dar salida y respuesta eficaz a estas mujeres. “Necesitan de apoyos, primero en sus necesidades más primarias de alojamiento, atención de sus hijos, etc., para después dar el salto, a través de procesos de la autoestima y recuperar temas más psicológicos, a un empleo digno”, concluye.

 

 

Esther Peñas/Nathalie Domínguez