Reflexionar sobre la calidad de vida y el empleo de las personas con discapacidad. Esta es la intención de las Naciones Unidas que ha organizado esta semana, del 17 al 19 de julio, diversas conferencias sobre los retos y objetivos del sector de la discapacidad en el mundo.
La sede de la ONU en Nueva York ha sido el escenario escogido para hacer balance de la situación en la que se encuentran los aproximadamente mil millones de personas con discapacidad.
Según la información publicada por el organismo internacional, el 80% del conjunto de la población con discapacidad está en edad de trabajar "pero se enfrentan a diario con barreras físicas, sociales y culturales que impiden su acceso a la educación, formación y al empleo".
Durante su intervención, el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, ha declarado que "juntos debemos actuar para alcanzar los objetivos de la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad, es decir, la eliminación de la discriminación y de la exclusión, y la creación de sociedades que den importancia a la diversidad y a la inclusión".
LA OIT
Estas jornadas, de gran utilidad para hacer balance sobre las condiciones de vida de las personas con discapacidad, fueron la ocasión perfecta para presentar los datos de un estudio realizado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) a este respecto.
Dicho estudio, basado en la población con discapacidad de diez países en desarrollo con ingresos bajos o medios, destaca la gran importancia que tiene para el crecimiento económico la inserción laboral de este colectivo en riesgo de exclusión. De hecho, aseguran, la exclusión de estas personas del mercado de trabajo "se traduce en una pérdida del 3% al 7% del Producto Interior Bruto". Cantidad nada desdeñable teniendo en cuenta la situación económica y social actual en el mundo.
Para la OIT las claves se encuentran en la unión de las políticas sociales, económicas y medioambientales, ya que la falta de independencia de este grupo social no hace más que alimentar su grado de exclusión de la sociedad y del mercado laboral, provocando un consecuente acercamiento a la consecuente pobreza.
Además, en su una nota de prense, recogen a este respecto que "a las personas con discapacidad (...) se les niega todo tipo de igualdad de oportunidades en materia de educación y sanidad, y no tienen la oportunidad de acceder a las infraestructuras públicas porque en el momento de su creación no tuvieron en cuenta las necesidades de este colectivo".
El director general de la OIT, Guy Ryder, recordó aludiendo a dicho estudio, que los cambios demográficos rápidos están repercutiendo en un mercado de trabajo especialmente complicado para el sector más joven presentando “inquietantes consecuencias a largo plazo”.
Entre las propuestas que acompañaron su intervención destacaron “el crecimiento del nivel de inversión en las infraestructuras, el aumento del nivel de cobertura salarial, mejorar los mecanismos de fijación de salarios, extender la cobertura de los regímenes de protección social o adaptar los programas de empleo públicos como herramienta de protección social para los más vulnerables”, entre otros.
ACTIVACIÓN ECONÓMICA
En la agenda de estos tres días abrieron un espacio amplio para la Conferencia de los Estados Partes de la Convención, inaugurada por su presidente keniata Macharia Kamau, que abordó la situación económica de las personas con discapacidad, recomendando la puesta en marcha de “sistemas de protección social para todos y estrategias de reducción de la pobreza”.
En este marco, la Conferencia de Estados Partes también ha recomendado que los procesos de cooperación regionales, nacionales o internacionales enfocados al desarrollo económico y social no se olviden de las personas con discapacidad, apelando a la existencia de numerosas lagunas en el ámbito de la lucha contra la marginalización de las personas con discapacidad en numerosos Estados.
A este respecto, Kamau hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que “acepten la discapacidad como un elemento de la diversidad humana” y para que promuevan los principios que “permitirán un mundo mejor para todos”.
En este marco de actividad económica, también mostraron su voz los representantes de los fondos y programas de la ONU, quienes mostraron las actividades que están desarrollando para poner en marcha los términos y objetivos de la Convención.
Ejemplo de ello, fue el de Alexandra Posarac, jefa del equipo “discapacidad y desarrollo” del Banco Mundial, a cuyo parecer faltan planes de acción nacionales en este contexto, así como servicios sociales sin prejuicios.
Otra perspectiva mostró Margareta Wahlström, representante de la Secretaría general para la estrategia internacional de prevención de catástrofes de la ONU (UNISDR/SIPC), quien recodó aludiendo al tsunami en Japón de 2011 la necesidad de que “las personas con discapacidad participen en todos los procesos de estrategias de respuesta en caso de catástrofe”.
Mientras que Kazi Afzalur Rahman, representante especial adjunto de la Organización Mundial del Turismo, felicitó a la comunidad internacional por los cada vez mayores destinos preocupados por la accesibilidad y necesidad de las personas con discapacidad, Jahan Selim, director de prácticas en materia de reducción de la pobreza del PNUD, citó alguno de sus proyectos puestos en marcha en materia de asistencia, como el de la República de Moldavia destinado a promover la inclusión social, o bien el de Costa Rica centrado en la inserción laboral de este colectivo.
AGENDA
Con el fin de reforzar el seguimiento de la discapacidad en el mundo, la Asamblea General de la ONU ha convocado para el 23 de septiembre una reunión de alto nivel sobre discapacidad y desarrollo. Este encuentro, informan, girará en torno al tema titulado "El camino a seguir: un programa de desarrollo que tiene en cuenta la cuestión de la discapacidad para antes y después de 2015".
En esta reunión, se espera que los jefes de Estado y de gobierno se pongan de acuerdo sobre el procedimiento que hay que seguir para promover la inclusión de las personas con discapacidad en todos los aspectos del desarrollo y de la sociedad para el año 2015 y su posterior continuidad en el tiempo. El principal reto, apuntan desde la ONU, es la armonización de las legislaciones nacionales con las disposiciones recogidas en la actual Convención.
Asimismo, la Oficina de la Conferencia de Estados Partes de la Convención anunció que su VII Conferencia sobre los derechos de las personas con discapacidad se mantendrá en Nueva York, del 10 al 12 de septiembre de 2014, siendo la República de Singapur el 133 Estado en ratificar dicha Convención.
Nathalie Domínguez / Fuente y Foto: ONU