La RSC requiere un fuerte liderazgo empresarial

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Fundosa Social Consulting de Castilla –La Mancha junto con la Escuela universitaria de Magisteriohan organizado las primeras Jornadas Universitarias de la Discapacidad en Toledo.

La falta de un liderazgo empresarial y de directivo en los que poder personificar el compromiso con la responsabilidad social corporativa impide que ésta cale en la sociedad, según Josep Maria Lozano, el profesor de la escuela de negocios Esade.

Lozano, que presentó el libro 'La empresa ciudadana como empresa responsable y sostenible', considera que hay una corriente de fondo en los mercados, los profesionales y las nuevas generaciones de directivos en los que se demanda un cambio que es más fuerte de lo que ha llegado a manifestarse.

El académico cree que en materia de responsabilidad social corporativa hay que seguir avanzando puesto que la consolidación esta lejos, según dijo durante una entrevista a Servimedia.

A este respecto, considera que el punto más débil es el que hace referencia a los consumidores, puesto que la falta de información reduce la sensibilidad en comparación a otros actores.

Respecto al libro que presentó, supone un balance de años de trabajo, una crónica del debate de la responsabilidad social en España, y además quiere ser una cierta ordenación de registros para enfocar el tema.

En este punto, Lozano diferencia entre acción social, responsabilidad social de las empresas, empresa responsable y sostenible, y la empresa ciudadana.

"Con esta terminología no quiero hacer disquisiciones semánticas, pero sí poder distinguir los distintos aspectos de los que se compone para poder enfocar la cuestión, puesto que existe una confusión desde el punto de vista de las prácticas empresariales que no son estrictamente económicas".

"A cualquier cosa se le llama social, hay que distinguir entre un tipo de prácticas empresariales, si estamos hablado de una estrategia empresarial, o de una manera nueva de entender la contribución de la empresa a la sociedad, concluyó Lozano".

En todo caso, en el siglo XXI se tiene que hablar de un nuevo modelo de competitividad responsable y sostenible, un nuevo debate sobre lo que es el éxito empresarial, y si una buena empresa se reduce a sus buenos resultados económicos o no.

 

 

Fuente: Servimedia