Las zonas con menor porcentaje de universitarios son centro y Canarias con un 13,3 y un 13,0
Redacción
Tan solo el 17,5% de la las personas con discapacidad en edad activa cuenta con estudios superiores, frente al 37,4% del resto de la población, según los datos recogidos por Odismet, el Observatorio sobre Discapacidad y Mercado de Trabajo, de Fundación ONCE y provenientes de la actualización más reciente del empleo de las personas con discapacidad publicada por el INE el pasado mes de diciembre.
De acuerdo con la citada fuente, el 21,2% las personas con discapacidad en edad laboral no supera los estudios primarios, mientras que son las mujeres las que elevan la media de la formación superior de las personas con discapacidad, con un 20,9% de licenciadas, 6,1 puntos más que en el caso de los hombres, algo que también ocurre entre la población sin discapacidad.
En función del tipo de discapacidad, la tasa de acceso a la educación superior es más alta en las personas con discapacidad física (21,8%), seguidas de las discapacidades visual y auditiva (20,3% y 18,2% respectivamente).
Por otro lado, a medida que aumenta el grado de discapacidad se reduce la proporción de personas con estudios superiores. Por comunidad autónoma, las regiones del noreste como Aragón, La Rioja, Navarra y País Vasco alcanzan un porcentaje de personas con discapacidad con estudios superiores del 19,6% y mientras que Madrid llega al 20,8%, datos muy superiores al 16,9% de media. Las zonas con menor porcentaje de universitarios son centro y Canarias con un 13,3% y un 13,0%.
El 4,5% de la población con discapacidad en edad activa (unas 83.000 personas) no cuentan con ninguna formación, según las últimas estadísticas disponibles. Los datos revelan que la tasa de analfabetismo entre las personas con discapacidad es once veces superior que entre personas sin discapacidad (que cuentan con un 0,4% de personas sin formación). Las características de cada tipología de discapacidad evidencian notables diferencias, así, la tasa de analfabetismo entre personas con discapacidad intelectual se dispara hasta el 22,6% cinco veces más que la media del colectivo.
Por último, con respecto a la evolución, con datos sobre el conjunto de la población con discapacidad en edad activa, que se recogen en ‘El empleo de las personas con discapacidad’ del INE entre 2008 a 2020 se aprecia una mejora progresiva del nivel educativo de la población, aunque la brecha con la población sin discapacidad no se reduce significativamente.
Jóvenes con discapacidad
El 37,7% de los jóvenes con discapacidad se encuentran en situación de riesgo de pobreza o exclusión social en España, según los datos recogidos por Odismet. Esta misma fuente refleja que en España se registran 107.600 jóvenes con discapacidad, el 5,6% del colectivo, con una tasa de prevalencia del 2,5% en el caso de los jóvenes de 16 a 24 años. Entre ellos, el 68,7% son hombres
Los datos de la actualización más reciente del empleo de las personas con discapacidad publicada por el INE entre las personas con discapacidad de entre 16 y 24, cursa estudios un 56 por ciento frente al 71,5 por ciento del resto de la población.
El nivel formativo de los jóvenes con discapacidad es inferior comparado con las personas de 16 a 24 años sin discapacidad. Mientras que, entre estos últimos, apenas se registra analfabetismo, en el colectivo representan más del 10,7%. Lo mismo ocurre en el extremo opuesto, un 3,4% de jóvenes con discapacidad tienen estudios superiores, mientras que en sus homólogos sin discapacidad el porcentaje es del 13,8%. El 32,5% de los jóvenes con discapacidad no supera los estudios primarios.