El Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores de la UE (EPSCO), ha mantenido su segunda sesión anual los días 18 y 19 de junio en Luxemburgo. Los temas más importantes en este encuentro fueron el Semestre Europeo, el empleo y la igualdad de género en los consejos de administración.
Respecto al Semestre Europeo 2015, los ministros han debatido las medidas de empleo y política social contenidas en las recomendaciones específicas por país. Dichas recomendaciones ofrecen un asesoramiento individual sobre las medidas que cada país de la UE debe adoptar para cumplir los objetivos conjuntamente acordados.
El resultado de los debates ministeriales se recogerá en las recomendaciones por país que deberá refrendar el Consejo Europeo en su reunión de los días 25 y 26 de junio.
SEMESTRE EUROPEO 2015 Y EMPLEO
En la sesión celebrada ayer, el ministro letón de Bienestar Social, Uldis Augulis, puso el broche a los debates sobre el Semestre Europeo, empleo joven y la brecha salarial de las pensiones por motivos de género.
Las principales discusiones giraron en torno a la aplicación de las recomiendaciones específicas por países y si estas necesitan mejorarse. "La UE se encuentra en una fase temprana de la recuperación, sin embargo hay muchos retos por alcanzar. Los Estados miembro han implementado importantes reformas estructurales y estos esfuerzos continuarán", declaraba Augulis.
El Consejo alcanzó acuerdos políticos sobre cuatro puntos que deben formar parte activa de la agenda de los Estados: promover la creación de empleo y el empleo de calidad; favorecer la formación, competencias y aprendizaje continuio; e impulsar la inclusión social, combatir la pobreza y promover la igualdad de oportunidades.
Promover el emprendimiento y reducir las barreras que impiden la contratación de personas, así como la carga fiscal son aspectos que deberían regularse a fin de que pueda ofrecerse una adecuada protección social a la par que empleo y crecimiento.
La educación y formación es un tema relevante de cara a la adecuación de competencias con el mercado laboral actual y evitar el abandono escolar temprano. A este respecto, el desempleo juvenil y el alto número de jóvenes que ni trabajan ni estudian también ha de tratarse mejorando el proceso de transición de la escuela al trabajo, e incluyendo la plena implementación de la Garantía Juvenil.
Las normas de protección de empleo y la legislación laboral han de ser plenamente favorables a la contratación y a la protección de los trabajadores y de parados. Asimismo, subrayan en las conclusiones, los Estados miembro han de promover un mercado inclusivo, abierto a hombres y mujeres, poniendo en marcha medidas antidiscriminatorias eficaces, e invirtiendo más en capital humano.
En este marco, los Estados miembro deberían modernizar sus sistemas de protección social para ofrecer garantías suficientes a las personas en todas las etapas de su vida, promoviendo la inclusión social y la igualdad de oportunidades.
En materia de empleo joven, el Consejo adoptó las conclusiones del Tribunal de Cuentas Europeo relativo al esquema de la Garantía Juvenil y la alianza europea para el aprendizaje. Aparte, recuerda que la Iniciativa de Empleo Joven cuenta con mil millones de prefinanciación.
Siempre en el contexto del empleo, EPSCO tomó nota del informe sobre el progreso de la inserción de mujeres en los consejos ejecutivos y no ejecutivos de las empresas y la directiva de igualdad de trato. Dicho informe recoge, entre otras cosas, incrementar de aquí a 2020 la participación de la mujer hasta el 40% en la toma de decisiones económicas de alto nivel.
IGUALDAD EN LAS PENSIONES
Además del empleo, el EPSCO ha recordado que los Estados miembro también han de tratar las diferencias en los cálculos de las pensiones entre hombres y mujeres. Para ello, deben promover un análisis en las causas y efectos de estas diferencias; desarrollar un indicador en el marco del Comité de Protección Social y adoptar medidas para tratar estas brechas.
Teniendo en cuenta que el tema de las pensiones depende en su mayoría de las políticas nacionales, los Estados de la UE tendrán que tratar por diversos medios las medidas más adecuadas para solventar sus problemas en este sentido. "Estas conclusiones permitirán a los Estados miembro progresar hacia una igualdad de facto entre hombres y mujeres en términos de independencia económica", apunta EPSCO.
Nathalie Domínguez