España es el undécimo país en la prelación de la UE, cuya media es de un 28,4%
Redacción
España es el undécimo país de la UE con mayor proporción de personas con discapacidad en riesgo de pobreza o exclusión social, con un 32,5%, en una clasificación que encabeza Bulgaria (50,7%) y que cierra Eslovaquia (19,2%), según datos de Eurostat. El riesgo de pobreza o exclusión social (abreviado como Arope, por sus siglas en inglés) corresponde a la suma de tres componentes: riesgo de pobreza tras las transferencias sociales, carencia material severa de bienes y proporción de personas menores de 60 años que viven en un hogar con una intensidad laboral muy baja. Esos tres elementos conforman la denominada tasa Arope.
La limitación de la actividad considera la incapacidad duradera para hacer actividades habituales debido a problemas de salud o discapacidad. Los indicadores basados en este concepto se pueden utilizar para evaluar el estado de salud general, la discapacidad y las desigualdades relacionadas y las necesidades de atención de la salud poblacional.
Los datos de Eurostat, correspondientes a 2019 y recogidos por Servimedia, indican que un 28,4% de la población de la UE con discapacidad (de 16 años o más) estaba en riesgo de pobreza o exclusión social, en comparación con un 18,4% de quienes carecían de limitaciones de actividad.
Se obtuvieron resultados desiguales para la tasa de riesgo de pobreza (21,1% frente a 14,6%), la tasa de privación material grave (8,8% frente a 4,4%) y la proporción de personas menores de 60 años que viven en hogares con muy baja intensidad de trabajo (22,8% frente a 6,5%). Este último resultado refleja el mayor acceso al mercado laboral para las personas con limitación de actividad.
En cuanto a España, ocupa el undécimo puesto con un 32,5% de personas con discapacidad en la tasa general de riesgo de pobreza o exclusión social.
De modo más concreto, España es tercera en la proporción de personas con discapacidad que viven en hogares con una baja intensidad laboral, con un 34,0% (22,8% de media comunitaria); novena en riesgo de pobreza, con un 23,6% (21,1% de media comunitaria), y decimosexta en privación material severa, con un 7,5% (8,8% de promedio en la UE).
Los países con mayores tasas de personas con discapacidad en riesgo de pobreza o de exclusión social son Bulgaria (50,7%), Letonia (42,1%), Estonia (40,0%), Lituania (39,9%) e Irlanda (37,8%). En cambio, los de menor proporción de personas con discapacidad en situación de riesgo de pobreza o de exclusión social son Eslovaquia (19,2%), Dinamarca (20,3%), Austria (22,2%), Finlandia (22,5%) y Francia (22,9%).
Por otro lado, los datos de Eurostat indican que el 68,0% de la población de la UE con una limitación de actividad habría estado en 2019 en situación de riesgo de pobreza si no llegaran a recibir prestaciones sociales o pensiones.