Una emprendedora gallega con discapacidad ha puesto en marcha una empresa híbrida que combina una tienda de moda y una cafetería en el mismo recinto. La iniciativa cuenta con el apoyo de Fundación ONCE 
en el marco de las ayudas que la entidad concede cada año al autoempleo.
Ana Belén Rodríguez, de 42 años de edad, tiene una discapacidad auditiva desde los seis. Esta circunstancia no le ha impedido desarrollarse profesionalmente, pero reconoce que se ha visto obligada a realizar “más esfuerzos que una persona sin discapacidad”, tal y como informa la Fundación.
Aunque previamente contaba con un puesto de trabajo y había venido desarrollando una carrera profesional en diferentes compañías de reconocido prestigio, donde trabajó como operaria y como administrativa, la insatisfacción laboral y, sobre todo, salarial la impulsaron a poner en marcha un sueño que mantenía desde niña: montar una tienda de ropa de mujer.
Pero su sueño lo llevó aún más lejos y, tras analizar las posibilidades del mercado, decidió dar vida a ‘Evasé’, un proyecto innovador en Galicia basado en la venta al por menor de ropa y complementos de mujer acompañado de un servicio de cafetería.
La actividad se basa en dos conceptos de negocio muy diferenciados en los que Ana Belén Rodríguez ha sabido encontrar el factor de complementariedad entre ambos: los clientes pueden entrar a las instalaciones del centro a comprar ropa y, mientras lo hacen, tomar un café, o viceversa.
Aunque el local, ubicado en la población orensana de Allariz, se centra, principalmente, en la venta de ropa y complementos de mujer y en el servicio de cafetería, las dimensiones del establecimiento, que cuenta con dos plantas, permiten ampliar los servicios que pueden ofrecerse. “En el mismo recinto, en la planta superior, se imparten cursos de pilates y yoga y, cada dos meses, organizo un mercadillo de ropa de segunda mano”, destaca la promotora de la iniciativa.
El proyecto también contempla la posibilidad de aprovechar el espacio destinado a la cafetería para dar cabida a otras actividades de ocio, como fiestas de baile latino, monólogos, conciertos, cuentacuentos y espectáculos de magia, entre otros.
Por otro lado, Ana Belén Rodríguez explica que la ayuda de Fundación ONCE ha sido muy importante para poner en marcha este proyecto. “Desde el momento en que decido emprender, me proporcionaron una persona para informarme y ayudarme en todos los pasos a seguir, con el plan de empresa, con la documentación...”, señala.
Aunque, en su opinión, el incremento del número de emprendedores con discapacidad es un hecho muy positivo y un gran ejemplo de superación, Ana Belén declara que ella no conoce actualmente a “ninguna persona con discapacidad que haya decidido emprender”. Sin embargo, sí que lanza un mensaje de ánimo a las personas con discapacidad con su misma inquietud emprendedora: “no sueñes tu sueño, vívelo”.
Redacción
